Por Daniel Chaves
Esta nueva edición de “Huellas…” nos
encuentra atravesados por la muerte del Comandante Hugo Chávez Frías, los
reclamos de una poderosa parte del Movimiento Obrero en torno de la lucha en
paritarias por aumentos salariales dignos, el escenario político nacional que
va mostrando una serie de ajustes y desajustes de cara al armado de listas para
las legislativas que se avecinan, y por estos días, la inédita asunción de un
Papa argentino, que conmueve y alegra a una importante población católica,
específicamente refiriéndome a la que habita en el municipio de La Matanza.
En el plano local, vemos con preocupación
una serie de reclamos barriales y en algunos casos, limitados a cuestiones
cuasi-domésticas que según denuncian algunos vecinos, no son debidamente
atendidos por las autoridades municipales. Basurales a cielo abierto, los
constantes desbordes e inundaciones que ocasiona el Río Matanza y que en este
caso sí afecta a decenas de miles de trabajadores; espejos de agua estancada y
en no pocos casos, el paupérrimo estado de las instalaciones edilicias en
escuelas de la zona, son algunos de muchos ejes a atender. No sin dejar de
reconocer un incremento evidente del delito en la mayoría de las poblaciones
del distrito. En muchas de estas cuestiones, una correcta articulación Nación –
Provincia – Municipio resultaría primordial para que el trabajo conjunto
garantice mejores resultados.
Por otra parte, es felizmente significativa,
tal como afirmó semanas atrás el propio intendente Fernando Espinoza, la
reapertura de más de 3000 fábricas en La Matanza durante los últimos 10 años de
gestión. El avance de la urbanización de “Villa Palito” y varios asentamientos
de vieja data, son una grata noticia para miles de trabajadores, formales e
informales, y desocupados que allí habitan. Es de desear que se prosiga
profundizando en ambas temáticas, para lo cual la nacionalización del comercio
exterior y la renta agraria servirían como fuente de financiamiento directo.
Aquí, y en todo el país. Seguiremos insistiendo en este aspecto.
Finalmente, y a modo de repaso de coyuntura,
observamos y convocamos al peronismo matancero a que encabece la construcción
de unidad amplia y duradera con el Movimiento Obrero en rol destacado y las
fuerzas populares que trabajan junto a la comunidad matancera, en la búsqueda
de fortalecer, desde el plano distrital , la composición de un vasto Frente
Nacional y Popular para contrarrestar sobre cimientos sólidos, todo avance del
conservadurismo y sus aliados políticos tanto de derecha, como desde el pseudo
progresismo en el distrito.
Anhelamos, desde el Socialismo de la
Izquierda Nacional, que el municipio más populoso de la provincia de Buenos
Aires sea ejemplo y estandarte de unidad del Campo Nacional – privilegiando de
modo central los intereses de la clase trabajadora- y no de divisiones,
deslealtades e internismos en el seno del mismo, que a lo sumo garantiza
posicionar mejor o peor a determinadas agrupaciones con respecto a otras, pero
que en sí, desgarra al Frente y genera desconfianza en la perspectiva que los
ciudadanos se forman de cara a estas menudencias y disputas por cargos
públicos.