domingo, 19 de abril de 2015

Presentación del libro "ESOS MUNDOS", en la biblioteca Municipal D. F. Sarmiento

   El pasado sábado 18 se presentó el libro "Esos Mundos", de Mario Berardi, en la Biblioteca Municipal de Morón "Domingo Faustino Sarmiento". La actividad se desarrolló en el renovado y muy adecuado salón de lectura de la mencionada institución. Vecinos, familiares, amigos, cultores de las letras y hasta ex alumnos del autor se dieron cita en lo que se constituyó como un ambiente ameno. 
   Se abordó la pieza literaria -que consta de 14 cuentos, divididos en 4 partes, "Mundos inciertos", "La mente y otros asuntos", "Imágenes y otros espejos" y "Mundos futuros"- responsabilidad que recayó en la escritora Giselle Aronson, quien brindó una descripción de la trama de algunos de los cuentos que componen el libro de Berardi. Anécdotas, sentires, contextos en los que fueron pensados y elaborados. Un verdadero desafío a viajar por "Esos Mundos". Asimismo, leyeron algunos de los materiales incluidos en el libro. 
   Mario Berardi, además de bucear por el torrentoso río de las letras, ha trabajado como fotógrafo, camarógrafo, compaginador, guionista y realizador audiovisual. 
  Tal como advierte el propio autor en la contratapa de su trabajo, "Esos mundos (...) desparrama situaciones, escenarios y personajes que han sido tomados de observaciones directas de la vida real. Los lectores podrán identificarlos con facilidad, ya que corresponden a los fragmentos más inverosímiles y disparatados del libro. Los pequeños detalles cotidianos, por el contrario, han sido inventados por el autor apelando sólo a su imaginación".  
   El autor se transforma en el mejor baqueano de Esos Mundos, y nos sabrá guiar con logrado estilo por ese recorrido donde las sensaciones varían, se desencuentran, transitan al filo del desatino o de la neurosis, acaso obsesiva, de un archivista,  y finalmente se vuelven a estrechar en los más inesperados escenarios, forjando que nuestro placer por la lectura no amengüe... ni por un instante. 




viernes, 3 de abril de 2015

BOLIVIA: ¿EL FIN DE LA HEGEMONÍA?

Por Rafael Bautista S.


A propósito de evaluar las últimas (e)lecciones subnacionales, conviene precisar el sentido mismo de la evaluación. Pues en eso consiste la crítica; que no es criticonería cómoda de la indiferencia (común a los analistas) sino, ante todo, evaluación. La crítica es evaluativa porque no parte desde un afuera neutral sino desde el compromiso común que no busca destruir sino construir. Ese compromiso nos compromete en un mismo horizonte, de donde se deducen principios y valores, desde los cuales la crítica tiene sentido; ese horizonte nos proponía el “vivir bien”, la descolonización, el Estado plurinacional, etc. La dirección y la consolidación de ese horizonte es lo que empezó a marcar las distancias. Pues si en el destruir un orden dado, todos estamos de acuerdo, en el construir un nuevo orden es donde aparecen inevitablemente las diferencias. Construir ya no es tan fácil y en esa apuesta se ve que no todos buscábamos lo mismo que pregonábamos. Detengámonos entonces en las lecciones que se deducen de la última elección.
Cuando la historia se repite es porque no se aprende nada de ella. Pues, de nuevo y como por una maldición, el triunfo nacional no se tradujo en victorias locales. La anterior experiencia ya debía haber servido para evaluar un proceder que coincidía más con el “mandar mandando” que no con el “mandar obedeciendo”. El tufillo soberbio del triunfo de la segunda elección presidencial descalificó una necesaria autocrítica a nivel oficial y, en consecuencia, vino la sorpresa –o el revés– de las elecciones subnacionales. Lo mismo sucedió ahora.
Al parecer este proceder empieza con la apertura de la nueva constitución, después de haber sido aprobada en Oruro. ¿Qué significaba eso? Que el poder constituido se sobreponía sobre el nuevo poder constituyente y se reponía a costa de éste, es decir, lo que debía ser transformado transformaba el nuevo proyecto estatal a imagen y semejanza del carácter colonial del Estado liberal. Para ello debía de operarse una sustitución: se desplazaba al sujeto plurinacional y, en su lugar, se imponía un sujeto sustitutivo, que se hacía con las riendas del proceso de cambio; éste ya no era más un proceso constituyente sino la máscara de un mismo ciclo estatal.
Esto tenía todos los sabores de un golpe de Estado, es decir, se arrebataba el poder constituyente para reconstituir los viejos poderes, sacrificando al propio proceso constituyente y, en consecuencia, al sujeto constituyente, o sea, al sujeto plurinacional. Por eso el gasolinazo y el TIPNIS no eran episodios marginales sino que ellos demostraban el abandono del horizonte constituyente que había propuesto el sujeto plurinacional y, desde el cual, tenía sentido un proceso de cambio en torno al “vivir bien” y la constitución de un Estado plurinacional.
Abandonado el horizonte se explica la devaluación de la política en el inmediatismo y el electoralismo. Cuando ya no hay horizonte entonces deviene la instrumentalización de la política y todo consiste en preservarse en el poder. Por eso ya no convenía “mandar obedeciendo”. Este sujeto sustitutivo no es el sujeto plurinacional, por eso tampoco en su horizonte se vislumbra el “vivir bien” sino el desarrollismo más capitalista. No es capaz de superar los prejuicios de la izquierda del siglo XX y sigue creyendo que el capitalismo es la etapa desarrollista necesaria para alcanzar el socialismo. Esa creencia le oculta los efectos suicidas que produce la lógica del capital y que se traduce ahora en crisis climática.
Si no tiene conciencia ecológica es difícil que apueste al “vivir bien”; pues sigue creyendo que, para lograr riqueza, hay que “dominar” a la naturaleza. En el fondo, sigue siendo capitalista sin darse cuenta. Por eso, en su idiosincrasia, lo indio que tenemos debe abandonarse y todo lo que proviene de lo indígena debe quedar atrás en el tren del progreso y el desarrollo. No cree en lo suyo, por eso lo condena, y apuesta por el mundo que ha producido el dominador. Quiere ser eso. Por eso adopta su política. Si luchaba contra el poder no era para democratizarlo sino para hacerlo suyo. Por eso desconfía de su propio pueblo; pues si él se considera la sede del poder entonces debe desconocer a la verdadera fuente del poder político. Por eso él se pone como sujeto sustitutivo y desplaza al verdadero sujeto de la revolución y lo reduce a un simple “obediente”. Por eso cree que puede moldearle a su antojo.
La (e)lección pasada contiene esa paradoja no resuelta. Hegemonía no consistía en el control absoluto sino en la capacidad de congregar a todos en un mismo horizonte común. Una política de Estado a largo plazo es sólo posible desde esa capacidad. Es cuando el todo de una nación apuesta al proyecto que ella misma se plantea como su proyecto verdadero; por eso está dispuesta a cambiar el sistema de creencias que le sostenía y apuesta por uno nuevo. Sólo en ese sentido, el “vivir bien”, adquiría significado pleno. Pero cuando éste es una pura bandera de la reposición del mismo Estado que se pretendía transformar, entonces desaparece aquella base de nueva disponibilidad común.
Hegemonía no quiere decir dominación. La dominación aparece cuando la hegemonía no puede consolidarse. Hay hegemonía cuando el proyecto propuesto congrega y converge al todo de la nación en un destino común. Sin hegemonía, el proyecto propuesto no se hace efectividad, pues su legitimidad se vacía. Pero cuando, discursiva y prácticamente, el proyecto no es capaz de congregar, entonces sucede la tentación de la imposición. Entonces ya no se piensa lograr hegemonía sino simple dominación.
En el campo político, consolidar hegemonía es fundamental, porque lo otro es la guerra, y allí sólo hay destrucción. Consolidar hegemonía no sólo es entendible sino hasta deseable; en política, lo real se mide por la mayor legitimidad que se logre. Eso es lo que quiere decir la frase de Hegel: “todo lo real es racional y todo lo racional es real”. En política, lo racional es la legitimidad y sólo cuando hay legitimidad, algo es real. La falta de legitimidad de un Estado produce su irrealidad, aunque exista como institución (acaba siendo un “Estado aparente”). El fundamento racional de toda legitimidad consiste en el acontecimiento originario intersubjetivo de dotarse, una comunidad política, de un proyecto de vida. Este acontecimiento intersubjetivo se produce históricamente, y es adonde concurren las subjetividades para transformarse en sujeto histórico, o sea, en pueblo.
Pero la hegemonía absoluta, aunque deseable, es imposible fácticamente. El querer realizarla es lo que acaba por vaciarla. La hegemonía deviene en pura dominación; y en eso consiste la expropiación de la decisión. El pueblo ya no decide, sólo acata y obedece. La democracia neoliberal se sostiene en ese artificio; expropiada la decisión, el voto ya no decide, sólo confirma lo que ya se ha decidido. Pero eso es imposición pura. Cuando ya no hay legitimidad horizontal, o sea, hegemonía, entonces no queda otra que la dictadura. La carencia de perspectiva conduce a aquello, porque toda hegemonía se produce en el tiempo estratégico; cuando hay perspectiva hay horizonte, con proyección hay visión y sabiendo mirando a lo lejos aprendemos a mirar, de mejor modo, lo que está cerca. Para saber por dónde vamos tenemos que tener muy claro a dónde nos dirigimos. Sin perspectiva no hay siquiera conciencia del lugar que ocupamos ahora.
Hegemonía es dirección y, en política, si no hay dirección hay caos. Pero confundir, hegemonía con dominación, supone una concepción devaluada del poder. Si todavía se cree que el poder es algo que se le sustrae al pueblo, o aquello que el pueblo concede (y renuncia) de modo definitivo, entonces lo que sucede es una “expropiación de la decisión”. Pero si la decisión es expropiada en beneficio de una elite entonces ya no hay legitimidad real.
El pueblo ya no decide, sólo confirma una exigua legitimidad vertical. El político weberiano concibe el poder de ese modo, como el “dominio legítimo ante obedientes”; por eso no ve en el pueblo a un sujeto sino a un objeto, por eso no quiere actores, sólo obedientes, cree que el dominio es algo legítimo, por eso no duda en imponer sus pareceres desde “arriba”. Una vez que el pueblo le ha delegado su poder, cree que puede ejercerlo de modo impune, sin tomar en cuenta a los demás y sin tener que rendir cuentas a nadie. Así empieza la fetichización de la política: el asalto del poder. Pero, si el pueblo es la sede soberana del poder, la primera y última sede de todo poder, ¿qué quiere decir “asaltar el poder” sino asaltar al pueblo mismo?
Entonces, el afán de querer el poder absoluto logró confundir hegemonía con dominación. Si ya no se puede convencer sólo queda el vencer. Pero, después de haber derrotado el proyecto de la oligarquía, la verdadera victoria ya no quería decir aplastar a alguien sino el ya no tener que aplastar a nadie. En la lógica de vencer hay que vencer a todos, en consecuencia, uno se queda solo. Y así se queda quien pretende el poder absoluto. Porque por querer tenerlo todo, acaba no teniendo nada.
Lo grave, en esa apuesta, es que arriesga el proyecto que lo llevó al poder. Por eso no había nunca que confundir: ni el MAS ni el gobierno son el proceso de cambio. Eso llevó a creer que defender al gobierno era defender al proceso de cambio, que sin el MAS no había tal proceso. Eso hizo del liderazgo un puro culto a la personalidad.
Por eso el fracaso del MAS en las últimas elecciones no puede significar, lo que ya anuncian los agoreros: “el comienzo del fin del proceso de cambio”. La implosión en Venezuela no es aislada, también sucede en Argentina, en Brasil, en Ecuador y en Bolivia; lo cual no es sólo imputable al Imperio sino también al devaneo ideológico que han adquirido nuestros procesos. El abandono de proyección estratégica civilizatoria y la ausencia de conciencia geopolítica, están conduciéndonos a la inanición revolucionaria; lo cual hace que nuestros gobiernos ya no actúen de modo proactivo y diluyan el contenido propositivo de una verdadera liberación. Por eso el pragmatismo prima y la política se vuelve puramente instrumental. Por eso en las últimas elecciones no había discusión ideológica y todo consistía en ofertas y demandas de carácter puramente mercantil. Por eso reencauzar el proceso tiene hoy más sentido que nunca.

La Paz, Bolivia, 1 de abril del 2015
Rafael Bautista S.
autor de “la Descolonización de la Política.
Introducción a una Política Comunitaria”,

Plural editores, la Paz, Bolivia
rafaelcorso@yahoo.com

jueves, 2 de abril de 2015

Un 2 de Abril, visto desde Inglaterra

Por Roberto Maydana
Colaborador especial desde Maidstone, Inglaterra

Hace casi dos años que vivo en Inglaterra pero éste fue el primer 2 de abril que pasé en tan lejanas tierras, ya que el año pasado me encontraba de vacaciones en Argentina y me tuve que quedar con las ganas de vivir la experiencia de, siendo argentino, vivir un día tan especial "de visitante"
Cada 2 de abril, al despertarme en Buenos Aires, el ambiente recordatorio se hacía presente inmediatamente; al desayunar, los periódicos recordaban a los héroes caídos en combate y en general adelantaban la agenda de actos del presidente de turno; en la televisión y en la radio solía haber entrevistas a ex combatientes, móviles cubriendo las expresiones de todo el arco político y alguna que otra historia inédita digna de ser contada. A medida que me iba encontrando con familiares y amigos, el tema Malvinas se hacía presente instantáneamente y al navegar por internet, las redes sociales compartían fotografías reivindicando que "Las Malvinas son argentinas" El 2 de abril, desde el comienzo del día, era un día dedicado a la memoria de aquellos jóvenes enviados a morir. Ahora que lo pienso mejor, el recuerdo de Malvinas ya comenzaba a las doce de la noche del día anterior, con el himno nacional sonando en cada medio de comunicación.

Ayer por la noche, 1 de abril, me fui a dormir con una cierta ansiedad curiosa que se vería resuelta al despertar. Y entonces empezó mi primer 2 de abril en Inglaterra.
Me levanté muy temprano, a las 3:30 hs, ya que mi turno laboral del día de hoy fue de 4:30 a 12 del mediodía. Las primeras impresiones las obtendría durante mi rápido desayuno, aún estando bastante dormido. Puse BBC 1 y emitían un programa grabado (lógico, a esas horas...), pase por BBC News y lo mismo. Fui al trabajo... ya miraría la tele al volver a casa, cuando seguramente ya se estaría hablando en cantidad sobre las islas que ellos llaman "Falklands"
En mi trabajo comparto tareas con gente de una franja de edad entre los 17 y los 60 años, por lo que podría obtener pensamientos variados. Sin embargo en ese momento comenzó una desilusión que, debo decirlo, me la veía venir. Nadie hizo alusión al tema Malvinas: ni un compañero.
Desde que llegué a Inglaterra estaba seguro que al mencionar mi nacionalidad, lo siguiente sería alguna mención, por parte del otro, sobre Malvinas, sin embargo nada de eso ocurrió. El 99% de las personas inglesas que fui conociendo (y que siempre me trataron con cordialidad) jamás mencionaron la guerra. Y a aquellos a los que les recordé el conflicto, me respondieron de manera superficial, con frases en inglés que pueden ser traducidas como "ah.. sí, eso pasó hace mucho tiempo" o "son cosas de los políticos" o "Ni sé dónde queda esa isla"
Solo dos ex compañeros de trabajo me hablaron alguna vez sobre Malvinas. Uno, un joven de 20 años, con el que me une una grata amistad, me dijo que sabía sobre el tema porque estuvo en una escuela militar y porque muy pronto se uniría a la armada. Al consultarle su opinión acerca de si las islas eran argentinas o inglesas, me respondió con un rotundo "Inglesas, por supuesto" y agregó que lo creía así porque siempre le enseñaron eso "como supongo que tu pensarás que son argentinas, en base a tus argumentos" Me sorprendió cuando me contó que viajaría a mitad de año a las "Falklands" como parte de su preparación militar. Le pedí que honrara a los caídos de ambos lados y me dijo que sí. Es una buena persona con la que, por supuesto, nos hacemos chistes a diario; él aprendió a decir en español "las Malvinas son inglesas" y yo le recuerdo siempre La Mano de Dios ('Hand of God), lo que lo hace poner rojo de bronca.
La segunda persona con la que hablé de Malvinas fue una de mis managers, quien además de adorar a las fuerzas armadas (como todos los ingleses) defiende con tesón y enfado la propiedad inglesas de las islas. Habla muy rápido y mal, lo que unido a mi básico inglés, no me permitió profundizar más en el debate, pero los dos dejamos claros nuestros puntos de vista, lo que no afectó para nada nuestra relación laboral. Me contó que uno de sus mejores amigos había muerto en la guerra de Malvinas, lo que (puede parecer tonto, lo sé) me hizo pensar en el hecho de que también hay gente inglesa que perdió a conocidos en la guerra.
Al llegar a casa me pude a navegar por internet y en Facebook, donde tengo al menos 50 amigos ingleses, había solo una referencia a Malvinas, que venía por parte de la misma manager que acabo de mencionar. Había escrito lo siguiente:
"Today is the 33rd anniversary of the start of the Falklands war ... 255 troops lost their lives protecting our people on the island ... The Argentinians may think the island is theirs and they may attack again but we don't go down without a fight ... "

Lo que traducido significa algo así como "Hoy es el 33 aniversario del comienzo de la Guerra de Malvinas. 255 soldados perdieron sus vidas protegiendo a nuestra gente en la isla. Los argentinos tal vez piensan que las islas son de ellos y ellos tal vez ataquen otra vez, pero nosotros no vamos a caer sin pelear"
¿Fuerte, no? Sobre todo me llamó la atención ese fragmento que deja a entender que los argentinos podemos llegar a estar pensando en atacar la isla, cuando desde la Presidenta hacia abajo, y desde hace muchos años, todos y cada uno de ellos no paran de repetir que no queremos otra guerra, que el único camino posible es el de la vía diplomática. Sin embargo el pensamiento de mi compañera de trabajo tiene un por qué: los medios de comunicación de Argentina no son los únicos que manipulan, los de acá no se quedan atrás, y desde hace tiempo vienen dando a entender que Argentina (con ayuda de Rusia) podría estar pensando en una "invasión"
En tiempos de elecciones generales (son el 7 de mayo) todo vale para captar votos y si hay que apelar al sentido patriótico, pues, lo hacen.
Mientras tomaba unos mates por la tarde, repasé nuevamente la televisión, ahora en vivo, pero en dos horas BBC News no hizo mención alguna al tema. Entonces me puse a observar el periódico "The Times" que compré al salir del trabajo: nada. Apenas siete palabras en una mini sección llamada "en este día" y que recuerda la guerra de la siguiente manera: "En 1982, Argentina invadió las Islas Malvinas"
No dicen nada sobre quién invadió primero las islas, mientras gobernaba Luis Elías Vernet, primer gobernador argentino tras la independencia de España por parte de nuestro país. Nada.
Wikipedia define la palabra Negación como un mecanismo de defensa que consiste en enfrentarse a los conflictos negando su existencia o su relación o relevancia con el sujeto.
Sería lógico que Inglaterra, que "dice" defender la "libertad" en el mundo, se sentara a negociar diplomáticamente la situación de Malvinas. Pero mientras Argentina recuerda cada día, y especialmente el 2 de abril, aquella funesta guerra y reclama justamente la soberanía, este argentino confirmó que en Inglaterra, en cambio, optan por la negación. Si dos no quieren, uno no puede.



miércoles, 1 de abril de 2015

Caminando también se llega lejos

Por Daniel Chaves

Meses de máxima intensidad, estos que nos deparó el inicio de un 2015 bien electoralista y pensado “a todo o nada” por el bloque antagónico al campo nacional.
En este contexto, archiconocido por todos nuestros lectores, resalta el kirchnerismo que, en tanto emergente indiscutible del movimiento nacional tras la crisis neoliberal que colapsó en el no tan lejano diciembre de 2001, es y será insuperable por un prolongado período, en tanto referencia política de masas.
La masa crítica con un marcado perfil frentista, incluye de modo parcial algunos apoyos de sectores independientes que también integran el campo nacional y popular, aunque no formando parte orgánica del Frente para la Victoria.
Se trata de la más sólida construcción popular que supimos darnos tras el continuado de debacles y estiletazos del imperialismo que apuntaban directo al corazón del pueblo trabajador.
Y camina. Con los consabidos límites propios de toda construcción nacional popular de fuerte base pequeño burguesa, y un reiterado déficit en la generación de referencias que permitan depurar internas siempre nocivas para la unidad del Movimiento. Todo ello inocultable, cierto. Pero con moderadas expectativas en materia de reformas sociales, fundamentalmente proyectadas por vías parlamentarias.
Se trata, acaso, de sostener las conquistas alcanzadas en estos últimos 12 años. Y aspirar a nuevos desafíos. No de esos con los que uno sueña y que en más de una ocasión supe reclamar desde esta trinchera de la escritura periodística y el ensayo breve. En la firme convicción de la necesidad de nacionalizar el comercio exterior, nacionalizar la renta agropecuaria y controlar toda producción y recurso natural que emane nuestra rica geografía. O bien derogar al fin la ley de Entidades Financieras entre otras legislaciones que datan de la última dictadura militar. Elevar sustancialmente el mínimo no imponible en la escala del Impuesto a las Ganancias…
… Pero No.
Golpe de escena, baño de realidad, agua fría y a recomenzar: Mientras transitemos apegados a objetivos más elementales y no por ello menos indispensables, y sepamos articular la satisfacción de necesidades y deseos del conjunto mayoritario del pueblo, de la mano de prudentes y graduales transformaciones socioeconómicas, el “Proyecto” podrá seguir caminando. Los límites está a la vista; no obstante, resta un gran trecho para transitarlo con esta dinámica.
Y lo escribiré de una vez: reclamar un proceso más radicalizado al actual estado de desarrollo del Movimiento Nacional, implica la construcción de un entusiasmo militante que al tiempo caerá en el desánimo ante la falta de concreción de dichas ensoñaciones. En buen romance: Somos lo que somos, y para las etapas venideras, en el mejor de los casos, deberemos luchar para sostener lo alcanzado y potenciar esfuerzos para ir sumando pequeñas-grandes conquistas, mientras la coyuntura y la correlación de fuerzas –sepámoslo desde ahora- lo permita. Caso contrario, acontecerá el resistir, una vez más.

Todos contra uno, y uno contra todos

Con un Poder Judicial en plena lucha interna aunque con importantes sectores en manos de enemigos –más o menos- jurados del kirchnerismo;
Un poderío internacional emanado desde el imperio de las finanzas y las corporaciones mediáticas  bombardeando a diario a la opinión pública, ergo, esmerilando las bases de apoyo del Poder Ejecutivo desde antaño;
La permanente fortaleza de la Oligarquía y sus patéticos pero dañinos representantes en la dirigencia política;
Y los desencuentros al interior del Movimiento Nacional, con variados actores que deberían haberse mantenido en estrecha unidad táctica con el gobierno y en defensa del mismo (por caso, importantes grupos de la dirigencia sindical y un considerable segmento de la clase media que formó parte del 54% en 2011 y fueron descreyendo del Proyecto Nacional por múltiples razones que exceden estas líneas)…
Ante tamaño conglomerado opositor, “correr por izquierda” al kirchnerismo en esta hora crucial, podría considerarse una actitud de irresponsabilidad política, que la historia sentenciará – o sepultará – a su debido tiempo. No integramos ese equipo ni aspiramos a hacerlo. Buscamos, eso sí, sumar riqueza al debate y proponer otras miradas. Multiplicar voces, horizontalizar en algo al Movimiento Nacional. Pero salirse de allí a la aventura implicaría nadar en el vacío político, y en lo concreto un esfuerzo dilapidado, amén de fuerza militante restada a las luchas del momento.
También vale enfatizar, que si se pretende ganar las presidenciales en Octubre, primero se debe transmitir al ciudadano mayor cohesión del Frente Nacional, y no tantos cruces verbales, divisionismos “de paladar negro”, mientras el bloque antinacional culmina sus ensayos de reagrupamiento y se dispone a lanzar nuevas ofensivas a toda prisa.

Fortaleza militante

A todo esto, en cuestión de pocas semanas, fuimos testigos no sólo de dos duros golpes contra la “operación Nisman” sin escuchar autocrítica de ninguno de los grupos complotados en ese intento de desestabilización institucional provisoriamente abortado, sino también de la nueva carga del juez Thomas Griesa para intentar imponer condiciones a un país soberano, a propósito del pago a los Holdouts, por cierto, ya aniquilada la Cláusula RUFO.
Como contraste desde la vereda popular, sendas demostraciones de un despliegue ciudadano conmovedor, primero para respaldar a la Presidenta de la Nación en la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso Nacional, y recientemente en apoyo incondicional a los organismos de Derechos Humanos, el 24 de Marzo en la Plaza de las Madres. Una de mis pensadoras predilectas, María Pía López, supo sintetizar esta marea humana clamando por Memoria, Verdad y Justicia, con mayor profundidad y poesía. Aquí comparto sus definiciones:
“Marchar para que no se atrevan, otros, a reivindicar el Golpe. Marchar para mantener vivo el pacto anti-procesista. Marchar para que en los pasos suene la memoria colectiva. Marchar como purga para la amenaza que siempre pende sobre los sobrevivientes. Marchar como fiesta de lo común. Marchar como reclamo de las libertades que faltan. Marchar como se canta, como se escribe, como se ama, como se cuida: para preservar la vida que es siempre actualización de la memoria. Marchar. Otro 24”.

El compromiso militante está intacto en miles de compatriotas, a pesar del desgaste al que se lo somete diariamente (en particular desde los grandes medios de comunicación) y es una cabal demostración de que el kirchnerismo, con el peronismo a la cabeza y variadas identidades políticas e ideológicas incluidas en el Frente Nacional y Popular, posee el sello distintivo para sintetizar al Campo Nacional de las primeras décadas del Siglo XXI.
Por todo lo mencionado, y a pesar de todo, seguimos marchando.

Con las banderas en alto, y con madurez al momento de trazar el nivel de expectativas para lo que se viene. 


GOLPES DE ESTADO GLOBALES: MINERVA DESARROLLÓ UNA FASE SUPERIOR

Por Juan Carlos Dennin

  En los albores de la avanzada neoliberal, llevada adelante por la dupla Ronald Reagan y Margaret Thatcher, el Imperio llegó a la conclusión de que los golpes de estado tradicionales comenzaban a originar situaciones perjudiciales.  Estas se enmarcaban tanto en cuestiones desfavorables de imagen, así como también en lo oneroso que a mediano plazo resultaban los mismos. Es así que comenzaron a desarrollar teorías que persiguiesen el mismo fin, pero que superasen esas situaciones adversas.
  Así fue que una de estas teorías fue  llevada a la práctica: es la denominada como la de los “Golpes Blandos”.  Su autor, el estadounidense Gene Sharp, resalta que "nosotros combatimos con armas psicológicas, sociales, económicas y políticas" (sic).  Llevados a la práctica, sus postulados  esta teoría han resultado exitosos  en países del este de Europa (con las “revoluciones naranjas”) y, en los últimos tiempos, también han triunfado en nuestras tierras.
  En 2009, Manuel Zelaya, presidente de Honduras, fue destituido tras  maniobras pergeñadas por la Suprema Corte de Justicia de ese país y los grandes medios de comunicación.  Así mismo, en 2012, Fernando Armindo Lugo Méndez, presidente de Paraguay fue destituido en un controvertido juicio político.
  No fue por casualidad, sino como alerta, el que se hayan viralizado en las redes sociales, durante los últimos meses,  los preceptos de los “Golpes Suaves o Blandos” que son siempre ocultados o desdibujados por los grandes monopolios de comunicación.  Esas alertas aparecieron en consonancia con las presiones que enfrentan los gobiernos de Nicolás Maduro, Dilma Rousseff y Cristina Fernández de Kirchner, cuyos gobiernos no gozan  de la simpatía del imperio, ni de los sectores del establishment autóctonos.
  La puesta en práctica de esta doctrina necesitó además de cimientos aún más profundos  para solidificar su desarrollo. Es así que diversas investigaciones permitieron comprobar que al finalizar la denominada “Guerra Fría”,  profesores de  universidades estadounidenses e instituciones dedicadas a la investigación social estaban siendo financiados en secreto por el Pentágono. La prioridad de la labor a desarrollar sería el entender qué es lo que lleva a los ciudadanos a implicarse en un movimiento político… para poder manipularlos a su antojo.
  Ese costoso programa del Departamento de Defensa de Estados Unidos, ha sido impulsado por el secretario de esa área Robert Gates, y  apunta a desarrollar a corto y largo plazo una “visión militar” de las problemáticas de política común de defensa con vistas a su uso por parte de los altos funcionarios y responsables implicados en la adopción de decisiones y aclarar las políticas que aplican los mandos militares.   De tal modo podrán conformar “ideas de guerra combativas relevantes inmediatas y a largo plazo”.
  La Minerva Research Initiative, del Departamento de Defensa lanzó este programa en 2008, año de la crisis bancaria global, con el fin de analizar las fuerzas sociales, culturales, conductuales y políticas en  regiones del mundo de importancia estratégica para los EE.UU. y neutralizar el descontento social mundial ante distintos sucesos.
 El Proyecto, que contiene, entre otros, ítems como “Demografía e Insurgencia”, “Efectos de la Asimetría, la Interdependencia y la Multipolaridad en la estrategia Internacional” y “La Vía estadounidense de Guerra Irregular”, se enmarca en la doctrina de la Guerra No Convencional (Guerra Sucia), basada en la Inteligencia y las Operaciones de Acción Psicológica, que conforman el bagaje de la llamada Guerra Psicológica e integral, en la cual participan, además de las Fuerzas Especiales de Operaciones (SOF) de EE.UU., agencias de espionaje como la CIA, la NSA, la DIA, la DEA y homólogas.
  En una de  sus pautas, se señala que los mensajes y conversaciones de Twitter se examinarán “para identificar a los individuos movilizados que puedan generar un contagio social y cuando estén movilizados.”
  La Oficina de Investigación Científica de la Fuerza Aérea de los EE.UU., gestiona para el período 2014-2017, un proyecto basado en un estudio dirigido por la Universidad Cornell.   El mismo tiene como objetivo desarrollar un modelo empírico “de la dinámica de la movilización de los movimientos sociales y los contagios.” Ese proyecto determinará “la masa crítica (punto de inflexión)” de contagios sociales mediante el estudio de sus “huellas digitales” en los casos de “la revolución egipcia 2011, las elecciones rusas de 2011 de la Duma y otras variables.  Solamente para 2014, el Congreso estadounidense le asignó al programa un presupuesto total de 17,8 millones de dólares.
  El análisis y la crítica de muchos investigadores independientes, destacan como  pretensión del gobierno estadounidense el militarizar a las ciencias sociales, poniéndolas al servicio de la guerra.  En mayo de 2008, la American Anthropological Association (AAA) indicó al gobierno que el Pentágono no dispone del «tipo de infraestructura para una evaluación de la investigación antropológica y de otras ciencias sociales, que sea  capaz de permitir “un examen por homólogos, simultáneamente riguroso, equilibrado y objetivo”, y exhortando, además, a que aquel tipo de investigación fuese gestionado más bien por agencias civiles, como la National Science Foundation (NSF).  Como respuesta, un mes después,   el Departamento de Defensa firmaba con la NSF un protocolo de acuerdo para una gestión conjunta de Minerva.
  Luego de esta situación  AAA advirtió que, aunque las proposiciones de investigación fuesen evaluadas en adelante por los comités de examen de la NSF, quienes tendrían la facultad de nominación para los puestos de dichos comités serían los oficiales del Pentágono.
  El Director del programa Minerva, Dr. Erin Fitzgerald expresó: “El Departamento de Defensa toma muy en serio la seguridad de los Estados Unidos, de sus ciudadanos y de los aliados y socios de los Estados Unidos. Si bien todos los retos de seguridad no causan conflicto, y cada conflicto no involucra a los militares de los EE.UU.,  Minerva ayuda a la investigación en ciencias sociales básicas de modo que ayude a aumentar la comprensión del Departamento de Defensa de las causas de la inestabilidad y la inseguridad en todo el mundo. Gracias a una mejor comprensión de estos conflictos y sus causas, el Departamento de Defensa puede prepararse mejor para el entorno futuro de la seguridad dinámica “.
  No es difícil deducir que, ante la dificultad de conseguir los objetivos fijados mediante un golpe blando, las resultantes del Programa Minerva podrán ser aplicadas in situ como complemento para una acción posterior.  Bastaría una Orden Ejecutiva del Gobierno contra un tercer país que afectara la “amplitud” de los intereses de EE.UU. para promover una revuelta local armada en ese territorio o hasta una intervención militar.
  Otro de los proyectos desarrollados, el Human Terrain Systems (HTS), fue ideado para implicar a los especialistas de las ciencias sociales en las operaciones militares en el terreno, y para ello desarrollaba sus entrenamientos en regiones alejadas, dentro de los propios Estados Unidos.  Adaptaban sobre su propia población el Proyecto COIN (contrainsurgencia) que habían concebido para las invasiones en Afganistán e Irak.  Las poblaciones locales eran vistas desde una perspectiva militar como un elemento amenazador para el equilibrio establecido del poder y de la autoridad,  y desafiante ante la ley y el orden.  El desarrollo de los procedimientos que abarca el Proyecto Minerva están contemplados como materiales de estudio en las principales academias militares norteamericanas.
  En otro ejercicio se planteaba un escenario de militantes ambientalistas que protestaban por la contaminación provocada por una central de carbón cerca de Misuri.  En el mismo se incluían algunos miembros de la famosa ONG de protección del medio ambiente Sierra Club. Los participantes tenían que lograr diferenciar a “los portadores de soluciones” y los “revoltosos” del resto de la población.  Esta última estaba destinada a convertirse en blanco de operaciones de información para desplazar su centro de gravedad hacia ese conjunto de perspectivas y de valores que constituye el “terminus deseado” de la estrategia del ejército.  ¿Algo parecido a la participación de los estudiantes en  las “guarimbas” venezolanas en 2014 ?
 Documentos de Planificación del Pentágono son los que fundamentan esta serie de juegos de guerra, o simulacros, surgidos del Proyecto Minerva.  Los mismos nos están indicando que la vigilancia masiva que desarrolla la National Security Agency (NSA) en todo el orbe está en parte motivada por la preparación de respuestas rápidas con vista a la desestabilización que resultaría  de los problemas a producirse en los sectores de la economía, del medio ambiente, y de la energía, y que afectarían los intereses de Estados Unidos de Norteamérica.

  En definitiva, Minerva es el nombre de un nuevo engendro de la colonización y de la guerra encubierta que nos hacen.   Es un excelente ejemplo de la naturaleza profundamente intolerante y contraproducente de la ideología militar norteamericana que debemos hacer fracasar.  Su inalterable misión es la defensa de un sistema mundial  impopular que responde a una ínfima minoría.  Por eso todas las agencias de seguridad nos presentan a nosotros, a la Patria Grande, a todos los que pretendemos corrernos de ese esquema, como terroristas en potencia.  

Cuando la caridad no empieza por casa

“La Iglesia Católica es una institución tradicionalmente machista, con el poder centralizado en los hombres, antifeminista.”

Por Noor Jimenez Abraham*
Doctora en Ciencias de la Comunicación Social
@noor_j_abraham

Al cumplirse veinte años desde que se formuló la Plataforma de Acción de Beijing -acuerdo por el que durante la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer, en China, 189 países se comprometieron a garantizar el ejercicio de los derechos de las mujeres-, se  observan ciertos avances legislativos pero todavía queda pendiente que los beneficios sean alcanzados integralmente.
Los medios de comunicación y la Iglesia aparecen como dos instituciones que detienen el avance de la agenda de género, en el primero de los casos, porque el negocio del mercado se retroalimenta de la objetivación femenina y en el segundo, porque su larga trayectoria androcentrista parece inamovible.
De paso por Buenos Aires, dos intelectuales del continente, Leandro Boff, teólogo, filósofo y ecologista, oriundo del Brasil, y Vladimir Acosta, doctor en ciencias sociales y licenciado en filosofía venezolano, expresaron su punto de vista, en el transcurso de la conferencia de prensa que dieron el 12 de marzo, en el Hotel Panamericano, previo a su participación en el Foro Internacional por la Emancipación y la Igualdad.

-          ¿Cuál es la situación de las mujeres en la región, especialmente de aquéllas  en las que la brecha se amplía por su condición, como las mujeres pobres, migrantes, discapacitadas, analfabetas, niñas, adultas mayores, con VIH, indígenas y otros colectivos vulnerables?

-          De a poco está creciendo la conciencia – expresó Boff- pero no se traduce rápidamente en decisiones políticas y administrativas para que pueda hacerse realidad, estamos cansados de discursos de liberación. A mi juicio todo el patriarcado, el machismo se refugió en los medios de comunicación que utilizan no sólo a la mujer sino partes de la mujer, sus senos, sus ojos, sus cabellos… y las manipulan,  venden su imagen, es el último refugio del machismo y hay que concientizar sobre eso. Creo también que la liberación de las mujeres viene de las mujeres mismas, nosotros somos aliados externos, pero si las mujeres no asumen, resisten, acusan y empiezan prácticas nuevas, nunca vendrá de la sociedad ni de la Iglesia una liberación que sea digna para ellas.

-          ¿En qué incide la existencia de un papa proveniente de Latinoamérica para que en la agenda de los países de la región se relegue el tratamiento de temas relevantes en cuanto a la violencia hacia las mujeres como son el aborto y la educación sexual infantil que influye directamente en las tasas de embarazo adolescente?

-          La lucha por la emancipación de las mujeres avanzó mucho pero no lo suficiente - manifestó Boff-.  La Iglesia Católica es una institución tradicionalmente machista, con el poder centralizado en los hombres, antifeminista. En el derecho canónico, hasta hace poco, ni siguiera podían ser testigos en un juicio y su domicilio tenía que ser el del marido. Esta es una situación absolutamente de opresión que configura una gran injusticia. Las mujeres no  tienen ningún poder de decisión, pueden participar en la Iglesia pero no en las decisiones de la Iglesia, muchos calculan la posibilidad de que el papa pueda nombrar mujeres cardenales, que no necesitan ser sacerdotes, pero está demorado; el papa contestó que lo dejaran primero arreglar la casa que está muy caótica con escándalos vergonzosos,  sexuales y económicos.


-          Independientemente de las buenas intenciones que puede tener un papa, y creo que el papa Francisco tiene muy buenas intenciones –sostuvo Acosta-, aquello de que con esta piedra formaré mi iglesia, en esta Iglesia no se puede modificar nada. La Iglesia es un partido político -esto se le ha atribuido a Stalin en la Segunda Guerra Mundial, cuando se hablaba de la posición política con respecto a los nazis.  Stalin había dicho cuántas divisiones tiene el papa, más que todos los ejércitos aliados, millones y millones de católicos que creen que el papa exactamente es el Vicario de Jesucristo, ¿cómo se discute con quien es el representante de Dios en la Tierra?. Se pueden modificar cosas pero no puede haber democracia, se pueden hacer retoques pero es muy difícil que se pueda modificar esta estructura,  aunque la Iglesia no tiene el poder para quemar vivos a los disidentes, sigue teniendo el poder de excomulgarlos, arrinconarlos, aislarlos, como le hizo a Gutiérrez, el promotor de la Teoría de la Liberación, y algunos tienen que salir de la propia Iglesia. Soy bastante escéptico,  cuando hay un cambio en la Iglesia, ocurre 200 años después, imaginarse en la Iglesia Católica una mujer obispo, puede que pase, pero quizás, para el siglo XXIV o XXV.



KIRCHNERISMO LTD.

Por Sebastián David Jiménez

   Al momento de escribir estas líneas, los trabajadores nos encontramos en la víspera de un paro planteado, en principio, por los gremios del transporte agrupados en la CATT con adhesión de la CGT Moyanista, la CGT Azul y Blanca del gastronómico Luis Barrionuevo, los gremios Bancarios y la CTA de Pablo Micheli. Políticamente, el análisis de la medida de fuerza planteada para este 31 de marzo no difiere en lo fundamental del que se hizo para el paro del 10 de abril del año pasado: las causas son inobjetables, justas y de impostergable solución, pero tácticamente es un espanto, le hace el juego a la política del malestar que proponen los agentes locales del imperialismo. Desde luego hay matices, la coyuntura no es la misma que hace un año, este es un año electoral y a la necesidad de una respuesta a las demandas de los trabajadores se les suman la presión social producida por la avanzada judicial y, en breve, el inicio de los debates para la redacción de un “nuevo” Código de Trabajo Unificado que ya veremos que, a priori, de “nuevo” tendría muy poquito…
   Por un lado, la elección de una huelga como medida de lucha en detrimento de los mecanismos democráticos de negociación en parte reedita la práctica política adrede y sistemática por parte de los gremios opositores, que tiende a obviar al gobierno nacional descalificándolo como referencia política. Pero al mismo tiempo el kirchnerismo, como expresión política de los sectores nacionalizados de la pequeña burguesía, nada ha hecho para que los trabajadores se liberen de las peores herencias de los tiempos de la flexibilización laboral. No es un dato menor que, constituyendo la pequeña burguesía la base social del kirchnerismo “neocamporista”, sean justamente los sindicatos de base pequeño burguesa sus opositores gremiales más acérrimos. Por esto mismo es destacable el inclaudicable, pero no incondicional, compromiso de los gremios de la clase obrera que no solo movilizaron a más de ochenta gremios a Plaza de Mayo en apoyo al Gobierno Nacional para la apertura de las sesiones de legislativas, sino que además ponen al interés político patriótico por delante de la lucha social de clase. La Clase Obrera, industrial o de la construcción, no olvida la lucha de clases pero entiende, consciente o intuitivamente a veces, que lucha nacional y lucha social en vez de oponerse se superponen y combinan de manera permanente. El kirchnerismo dice descreer de la lucha de clases, pero en la práctica y en su política hacia los trabajadores en general demuestra ser bien clasista.
   Si el kirchnerismo es el peronismo posible se demuestra en parte a partir de la reiteración de las limitaciones que históricamente tuvo el nacionalismo burgués. Cuando a una clase social no se la despoja de su base de sustentación material se la hiere pero no se la mata, entonces si en vez de apoyarse internamente en el 54% del 2011 y externamente en la Celac y el Unasur para iniciar un proceso serio de nacionalización de la renta agropecuaria, el comercio exterior e interior y te dedicas a dormir la siesta de la Sintonía Fina, a la Oligarquía solo le queda esperar a que pase el temblor y al tiempo simplemente continuar su motín antipatriótico permanente. ¿Cómo no tener paciencia si los resortes fundamentales del aparato financiero y la renta agropecuaria siguen en manos de los agentes locales del Imperialismo? ¡Si hasta el propio Nisman se animó a ilusionar en su insólita denuncia que el Estado Argentino comerció granos con Irán! Iluso empleado de la CIA, no negociamos granos, nuestros granos no nos pertenecen.
   Más allá de todo esto, tan más allá que el proceso aun no comenzó, está en marcha el proyecto de unificar la legislación laboral vigente y actualizarla en un nuevo Código de Trabajo re-redactado. En teoría se prevé la conformación de una amplia comisión de trabajo y de foros de debate organizados de manera que todas las centrales obreras, empresarios y abogados laboristas participen y aporten al documento final. El encargado principal de la redacción es el Dr. Héctor Recalde. Fuentes de gobierno dejaron trascender que el fin del proyecto sería el de “compilar, ordenar y jerarquizar toda la legislación laboral vigente en el país y redactar el nuevo Código”. No se prevén, en principio, cambios de fondo ni referencia alguna a la implementación de algún sistema de actualización periódica del mínimo no imponible al Impuesto al Salario, mucho menos de su justa eliminación, ni de regularización de las tercerizaciones cuyo tratamiento es deuda acumulada desde las reformas a la Ley de Contrato de Trabajo de la última dictadura. La CTA conducida por Hugo Yasky ya se ha pronunciado a favor de no cerrar la reforma sin introducir cambios en ninguna de estas aéreas, en el mismo sentido se expresó Facundo Moyano, integrante de la Subcomisión de legislación laboral que participara de las reuniones de debate. La misma postura se espera que tomen los gremios obreros agrupados alrededor de la CGT Balcarce conducida por Antonio Caló, en lo que sería una reunión táctica de los trabajadores en la defensa de sus intereses.

   Es un deber de los trabajadores motorizar estas discusiones desde el Movimiento Nacional, superando dialécticamente a su propia conducción  y a diferencia del sindicalismo apátrida plantear la lucha nacional, sin olvidar la lucha social ni por un instante, pero siempre, siempre, con la Patria Liberada como horizonte.


EL LEGADO DE CRISTINA

Por Guillermo Bustos
Militante de Patria y Pueblo
Socialistas de Izquierda Nacional

Aquí no es intención discutir todo su legado, sino un aspecto del mismo, que es el que más preocupa a la reacción y la oligarquía, aspecto bien enunciado durante la apertura del Congreso el 1ª de Marzo: “no dejo un país cómodo”. Su expresión militante más acabada e indiscutible, fue la concurrencia de unas 300.000 personas, que venían a escuchar el último discurso público de su Presidenta.
Entre las conquistas y derechos otorgados, existe una proporción, no siempre cuantificable, con la masa movilizada. Se podrá explicar una y mil veces en la necedad y la seudo ciencia, que esas conquistas no existen o son sólo “prebendas de demagogia barata para engañar a las masas”, pero que la masa existe, es innegable y es la energía indispensable,  de la Liberación Nacional y La Revolución Social. En términos marxistas, la cantidad de una clase y un pueblo que se quiere liberar y cambiar el orden establecido indispensable, para la cualidad revolucionaria. Esto es lo que más temen tanto la reacción nativa como el Imperialismo y por eso, durante una semana, estuvieron discutiendo, en caso de ganar las elecciones, acerca de cómo podrían desarmar este legado de Cristina. Y no de casualidad, Mauricio Macri y Sergio Massa, los dos principales opositores, estuvieron explicando que no quitarían los planes sociales y otras conquistas y derechos, pero sí explicaron que devaluarían para borrar toda conquista nacional, con una simple medida económica.
Para ampliar la masa, hay que poder desde este momento ampliar los derechos y conquistas, así la energía acumulada no se pierde, aumenta y podría darle al próximo candidato del Frente Para la Victoria posibilidades de ganar en primera vuelta, pero esto tiene que ser acompañado con una amplia movilización y militancia, propagandizando ante cada derecho, manifestando por cada conquista en los barrios y lugares de trabajo.
Un triunfo de los sectores más reaccionarios de la política, es la asunción de todos los sectores que incluyen a mega-explotadores, financistas, especuladores y cipayos de la sociedad, que darán apoyo con argumentos rayanos y hasta racistas, para avalar cada injusticia social.
Es aquí, donde esa “incomodidad” que representa para estos sectores la gran masa del pueblo, tendrá que militar el doble, movilizarse con dirigentes probados en las luchas por la emancipación del pueblo y con organizaciones que expresen con claridad las intenciones de los más necesitados y tengan un proyecto de país sin ataduras a los centros financieros imperiales.
Por lo contrario, un triunfo de la reacción y el imperialismo, abre una etapa histórica entre un país incómodo, a un país “cómodo” para éstos sinvergüenzas.
Quitando los derechos y conquistas de manera gradual o total, la masa de liberación empezará a decaer, es decir: pensar que esta masa movilizada pueda existir permitiendo el quite de toda conquista, es caer en probabilidades lejanas y aun así, tendríamos que empezar todo de nuevo, con compañeros y buenas ideas perdidos en el camino, muchos más que si nos organizamos pronto en la más amplia organización política y social posible, y decidir defender lo conquistado desde el vamos.
Por eso, debemos proponer desde éste pequeño espacio, que se recompongan los enlaces políticos y sociales, sin sectarismos y discutir lo que es indispensable: la ampliación de derechos, de bienestar para el pueblo y la clase trabajadora ya que las dos funcionarían, en los dos escenarios posibles, como conservación y concreción del legado del Kirchnerismo.




El General Manuel Savio

Por Rubén Lombardi

Hay hombres de nuestro ayer asociados a significaciones específicas: Rosas a la Soberanía, Artigas al federalismo, Perón a la justicia social, Mosconi al petróleo… y podríamos seguir con ejemplos varios.
El General Manuel Savio es el Padre de la Siderurgia argentina. Especie de heredero de Fray Luis Beltrán y continuador de las tesis esgrimidas por Enrique Mosconi, para transformar una economía agro-pastoril exportadora en otra que tuviera a las industrias de base como motor de crecimiento. Auspiciante tenaz de una movilización nacional de carácter militar y técnica al mismo tiempo, correlacionando las posibilidades de la industria con la Defensa. Persuasivamente declaraba que “el acero es la primera de las industrias y puntal de nuestra industrialización. Sin ella seremos vasallos”.
Bosqueja entonces un proyecto que claramente se perfila a producir materiales y elaborar materias primas básicas para la industria manufacturera, que le permitieran al país actuar con la máxima soberanía posible, sin depender de intereses externos que decidieran cuándo y qué industrias podíamos desarrollar. Savio partía de la premisa de convertir al Ejército en eje de la Industria Nacional. Algo así como una industria bélica con fines pacíficos pero disuasivos.
El Estado debía abrir el proceso en los primeros años. A medida que su trabajo se consolidara iba a ser factible asociarse con capitales privados  y formar Sociedades Mixtas. Ese era su pensamiento vertebral.
Creada a su inspiración, la Dirección General de Fabricaciones Militares (1941, Década Infame) propuso buscar hierro en el país. Los encontró en las serranías de Zapla, Jujuy. Los informes corroboraban que el yacimiento era una cuenca sedimentaria de hematita cuya potencia visible asegura grandes reservas y justifica sobremanera la inversión necesaria para emplazar un “Alto Horno”. Se inicia rápidamente la “Gesta Zapla”, cuando la Patria sufre el bloqueo de los grandes consorcios extranjeros.
Savio intenta formar una conciencia metalúrgica, apelando a los industriales y recordando que la fábrica argentina de cloruro de calcio debió cerrar por el dumping del exterior. Es entonces que aparece en escena el inefable órgano mitrista, el diario La Nación para proclamar “no tenemos hierro ni carbón de piedra, elementos indispensables de la gran industria”, para concluir que “en realidad no nos debemos quejar de la heredad que nos ha tocado en suerte, y NO HEMOS DE SER MINEROS MIENTRAS NOS CONVENGA Y GUSTE SER LABRADORES Y CRIADORES DE GANADO”.
El 11 de octubre de 1945, en coincidencia con los episodios militares y populares que cambiarían nuestra historia, se produce la primera colada de hierro fundido hecha con materias primas argentinas (carbón de leña) en la querida Zapla jujeña. Recordemos que la tradición en esta materia era proveerse del vendedor único inglés, como era el de Cardiff.
Ese primer chorro brillante de hierro hizo emocionarse al noble militar que dijo: “Iluminará el ancho camino de la nación argentina”.
Poco después Savio entrega al Presidente Perón su Plan Siderúrgico Nacional, sancionado después de hondos estudios oficiales. Así se origina SOMISA (Sociedad Mixta Siderurgia Argentina), cuyos Altos Hornos son emplazados en terrenos elegidos por el propio Savio a orillas del arroyo Ramallo, en las cercanías de San Nicolás. Como presidente de su Directorio renuncia a sus honorarios, pero no alcanza a ver concluidos sus sueños debido a su temprana muerte a los 56 años, en el mes de julio de 1948.
Muchas anécdotas y hechos gloriosos cubren la historia de este compatriota nuestro, siempre apasionado por nuestro desarrollo independiente. Cuando en el mes de agosto de 1945 se arrojan las bombas atómicas sobre las ciudades japonesas, saltó con la insistencia en que “tenemos que intensificar rápidamente la búsqueda de uranio en todo el territorio argentino. No se trata de fabricar la bomba, sino de pesar en el concierto mundial con la tenencia de uranio”. Así fue como los 30 geólogos de Fabricaciones Militares se lanzaron al relevamiento de nuestras montañas en busca de uranio, logrando hallazgos sorprendentes. Hoy sería tildado este patriota de “belicista”. Dos décadas después, Argentina estaba en el concierto de las pocas naciones generadoras de energía nuclear, como en 2015 estamos en el exclusivo ramillete de países que lanzan satélites geoestacionales propios al espacio.
En marzo de 1944 después de 1 año de estudios previos, comenzó la construcción de la planta industrializadora de Palpalá. Y en dieciocho meses se levantó un alto horno que, caso único en el mundo, se terminó construyendo de hormigón armado por la carencia de los materiales clásicos. Como combustible se utilizó carbón de leña del Chaco, Santiago del Estero y Salta. Inmediatamente saltaron los “Ecologistas” de entonces: “No se puede levantar la siderurgia con carbón vegetal. Vamos a quedarnos sin montes…” a lo que Savio replicó activando el vivero de Pirané y plantando 15.000 hectáreas de eucaliptos en Zapla – Palpalá, formando un bosque de 30 millones de árboles que han permitido hacer cortes cada siete años.
Así Palpalá se fue convirtiendo en un centro de irradiación industrial, y pasó de tener 3 míseras casas a 30.000 habitantes que la convirtieron en el tercer centro poblacional de Jujuy.
También debemos acotar que los sueños de Savio convivieron temporalmente y en la última etapa de su vida con la experiencia popular, obrera y fundacional del peronismo, lo cual deja márgenes para caminos no siempre coincidentes pero siempre dentro de la estrategia del Desarrollo Independiente.
Como producto de la generación de 1943, Perón se distinguía en compartir la idea de un país industrial, pero englobado dentro de las perspectivas de un desarrollo que partiera de la urgencia social y que abarcaba todos los renglones de la economía. Fue así que apoyándose en la creación de un fuerte mercado interno, empezara auspiciando las mayores conquistas sociales que conoció la clase trabajadora argentina. Habiendo preparado un equipo técnico militar en el Consejo Nacional de la Postguerra, desarrolló como primeros pasos un fuerte y necesario apoyo político y económico a la industria liviana y mediana, para consolidar una aceptación electoral concreta a sus planes emancipatorios. Fue así que canceló la Deuda Externa, nacionalizó los servicios públicos, donde descolló el comerciante Miguel Miranda, hombre fuerte de los primeros años peronistas, controló el comercio exterior con el IAPI, y creó una Marina Mercante para independizar el transporte de nuestros productos de los fletes y seguros del extranjero. Todo eso estaba contemplado en el Primer Plan quinquenal hasta 1951. El Segundo Plan auspiciaba demás de una relativa austeridad en el manejo de los recursos (ya no había viento de cola en el frente externo), el desarrollo de la Industria Pesada, en donde tenía su inspiración la idea central del General Savio. Pero don Manuel había fallecido súbitamente en 1948. Perón siempre tuvo en altísima estima al General Savio, en quien reconocía un cabal argentino.
Avatares de la economía y acontecimientos políticos hicieron que la aplicación total del Plan Siderúrgico de 1947 retardara su accionar y demorara su mayor fruto. El presidente Perón había firmado en 1955 con el Eximbank el único préstamo externo al que tuvo que recurrir para sortear un imprevisto: la falta de fondos para adquirir equipos y servicios para instalar la planta Siderúrgica de San Nicolás. en septiembre de 1955 cae Perón y el crédito estuvo en desuso a la vez que la planta de acero, en veremos.
En 1958, ascendido Arturo Frondizi al gobierno y con la decisión de estimular las industrias de Base, haría uso de los fondos y luego de efectuarse entre 1960 y 1961 las primeras coladas de arrabio, el primer deshornado de coque para fines metalúrgicos y la primera colada de acero, se realiza en julio de 1960 la inauguración oficial de la planta de SOMISA, hito del desarrollo industrial nacional.

Había nacido un 15 de marzo de 1892 en Buenos Aires. Suenan a través del tiempo las palabras de Manuel Savio de 1946: “La del acero es una industria básica sin cuyo desarrollo no puede considerarse que un país ha alcanzado su independencia económica. Incluso se comprueba la verdad opuesta: cuando menor es el desenvolvimiento de esta industria, mayor es la dependencia que se tiene del extranjero, con las graves consecuencias que de éstas circunstancias se derivan”.

 

Fuerte despliegue militante por la candidatura de Castagneto

El precandidato a Gobernador de la provincia de Buenos Aires, Carlos Castagneto, continúa recorriendo el territorio bonaerense. Con el apoyo de Alicia Kirchner, el viceministro movilizó a toda la estructura de KOLINA para apuntalar su candidatura.
Los militantes de la Corriente montaron mesas de difusión y cartelería en que el precandidato aparece junto a la Presidenta. “Carlos Castagneto. Con Cristina” juega la cartelería con las letras C sobre la foto del viceministro de Desarrollo Social y la presidenta Fernández de Kirchner.
La fluida relación con los intendentes, sus años de gestión en la cartera social y la militancia de base que tiene extendida por todo el territorio son sus cartas más fuertes. Respecto a lo primero, no sólo se relaciona con los jefes comunales ultra K, sino que dialoga con todos los sectores del PJ, con lo que suma adhesiones variadas. En cuanto a la gestión, acompañó a la ministra Alicia Kirchner desde el primer momento y es uno de los arquitectos de uno de los logros más importantes de este gobierno, que empezara Néstor Kirchner: el crecimiento con inclusión social.
Sobre la militancia, Castagneto forma parte de la conducción de KOLINA, una fuerza joven con organización y trabajo en todo el país y en toda la provincia. Toda la estructura de la Corriente está instalando la precandidatura del platense. Así se multiplicaron las mesas de volanteadas, los pasacalles y las charlas cara a cara con los vecinos. El propio Carlos mantiene reuniones seccionales con los referentes de cada distrito para planificar las siguientes acciones.

Con el slogan “Trabajando por la Provincia”, Castagneto intensificó su agenda de reuniones y recorridas por distintos puntos bonaerenses. “Nuestro compromiso es seguir trabajando para que la gente sea cada vez más feliz. El gobierno nacional nos deja un piso muy alto en restitución de derechos, y ese camino debe continuar. Tenemos que seguir transformando el país y la provincia de Buenos Aires. Por eso los invito a seguir creciendo juntos”.